En sus declaraciones a un diario regional, un alcalde extremeño, manifiesta que en su pueblo, desde septiembre hasta junio, se van a crear
60 puestos de trabajo a media jornada. Las
estadísticas de la EPA nos indican que en esa localidad hay un número próximo a
los 800 parados.
Los planes
institucionales de la Junta de Extremadura y de la Diputación Provincial darán
trabajo en la localidad del “ regidor” a un número muy limitado de
trabajadores, unos 60 parados a media jornada, lo que no es para tirar cohetes,
pues con este horizonte de empleo, el porcentaje de trabajadores en paro se
reduce un número poco importante. Lo peor de todo es que el nivel de aceptación de la situación económica y social es tal que poco a poco nos estamos
acostumbrando a considerar como normales los niveles de paro que hay en nuestras
localidades, y que en muchos casos superan el 35 % de la población en edad de
trabajar.