sábado, 18 de junio de 2022

El saqueo a manos llenas del salario de la población (el insurgente.org)

 

En algunos países europeos aparecen con fuerza movilizaciones populares contra los gobiernos que no ponen remedio a la subida imparable de los precios y al empobrecimiento continuado por la incapacidad de los salarios de responder a la inflación galopante. 

En el caso español, el saqueo de los salarios de la población no para. Tantos el gobierno como las grandes empresas facilitan artificialmente la subida de los carburantes y de otros productos que teóricamente no tienen ninguna explicación, el caso es aprovechar estos momentos en los que la guerra de Ucrania acapara todas las posibles justificaciones del encarecimiento de la vida.

Como señalan los compañeros del Insurgente de esta manera las grandes empresas se aseguran una super ganancia, incluso triplicando beneficios con respecto al ejercicio anterior, mientras que el gobierno central aumenta exponencialmente su recaudación vía impuestos proporcionales a un precio que no deja de subir.

En el caso del estado español es una barbaridad lo que están haciendo, robando a la cara a millones de trabajadores sus sueldos, y depauperando a gran velocidad a las familias trabajadoras con el silencio de los sindicatos, todos a sueldo del mismo bote.

Mientras tanto, pretenden lavarse la cara con una limosna de los 20 céntimos por litro que no es más que la devolución de una parte de lo que nos están robando subiendo el precio de forma artificial.

Para muchas personas que por razones de trabajo están obligados a moverse en coche particular los salarios se superan y no se espera respuesta organizada en la calle, sin duda llegará un momento en que los desplazamientos se transformarán en un privilegio de clases medias y altas.

(El insurgente.org)

 

El individualismo enemigo de la unidad de la clase obrera

 


Hay empresas que en algunos centros de trabajo consienten que sus trabajadores se desenvuelvan en unas condiciones laborales totalmente insufribles y esclavistas, de tal modo que desempeñan su actividad en un ambiente de nubes de polvo y humedad; partículas que obstruyen los poros de la epidermis, producen irritaciones en los ojos y atacan a los pulmones, acelerando una posible pérdida de la calidad de vida.

El esclavismo no es una cuestión que atañe sólo a siglos pasados, está presente en nuestros días y se manifiesta de muchas maneras, en la actualidad al igual que en el siglo XV, el objetivo que determina sus movimientos siempre es el mismo: la acumulación de capital.

A muchos dirigentes empresariales les preocupan poco las condiciones laborales de sus trabajadores, lo que les interesa nada más es que produzcan la mayor plusvalía posible.

Estos capitalistas dejan sus negocios en manos de quienes desempeñan la función de guardianes de la fuerza de trabajo; son centinelas que no se preocupan por otra cosa que no sea la eficacia de los procesos productivos; su aspiración es la de presentar al jefe una buena hoja de servicios; los buenos resultados del negocio es el máximo interés de estos protectores, a quienes preocupan bien poco las condiciones laborales en las que se realizan los trabajos.

El motivo fundamental para que estas situaciones ocurran es que clase obrera lo permita, lo que suele ocurrir por miedo a la pérdida del puesto de trabajo. La espada de Damocles aparece sobre sus cabezas ante el mínimo intento reivindicativo. La solución a todo esto, es la unidad colectiva de la clase obrera y la conciencia de clase; el individualismo no conduce a nada; sólo siendo un ÚNICO SUJETO ante la clase dominante se pueden conseguir derechos laborales.

jueves, 16 de junio de 2022

Contra el fascismo que crece como la hierba en Extremadura, en estos duros tiempos de calor

 

Lo que lleva ocurriendo en el campo, en la región extremeña, durante estos últimos años, es una ofensiva terrible de las patronales agrarias contra las condiciones de vida de los jornaleros y jornaleras. El objetivo de esta acometida es la eliminación de derechos conseguidos durante muchos años de luchas. En la actualidad, las organizaciones patronales tratan de volver hacia tiempos pasados e imponer jornadas con más horas de trabajo y salarios por debajo del salario mínimo interprofesional.

Los sindicatos CCOO y UGT que actúan en representación de la clase obrera agrícola en la negociación de un convenio colectivo que lleva ya varios años aparcado, no les ha quedado más refugio que convocar una huelga durante tres días ante las propuestas de una patronal reaccionaria y caciquil; no haber reaccionado a estas impresentables proposiciones hubiera significado la desaparición completa de estos dos sindicatos en el panorama sindical agrario extremeño.

La convocatoria de huelga se realiza en un momento en que urge la recogida de la fruta ante la rápida maduración que desatan las altas temperaturas y el perjuicio que acarrearía el retraso a los propietarios de las grandes empresas hortofrutícolas. La huelga es el arma que tiene la clase obrera para la defensa de sus intereses, su objetivo es conseguir buenas condiciones laborales. Los propietarios de los medios de producción tienen el poder que les da su posición económica en la empresa como dueños de las condiciones de trabajo y su objetivo es la obtención del beneficio. Es la lucha de clases, motor de la historia de la humanidad.

Los grandes capitalistas también consiguen implicar en reacción ante la huelga a sectores sociales, que en muchos casos concretos son pequeños propietarios que están endeudados, con muchos problemas económicos y próximos a la ruina, que siguen sin rechistar, ni la más mínima duda, las directrices que les marca el capital agrario. Para la conciencia de este grupo social los jornaleros y jornaleras son sus enemigos a batir.

Algunos elementos de esta cofradía populista, disfrazados con trajes de pensamientos e ideas pequeña burguesa, vienen a representar lo más puro y la esencia del fascismo. La naturaleza cultural que les orienta y les gobierna no es otra que la voluntad de resolver los problemas causados por las dinámicas del capitalismo con la eliminación de un plumazo de quienes ellos consideran que crean estos problemas.  Por ahora, el interés resolutivo sólo es teórico, en otros momentos de la historia fue práctico repleto de la violencia física, 

Las manifestaciones públicas de estos individuos derraman a borbotones ideas que nos parecen que no tienen sentido y son chapuceras, pero nos equivocamos, son mensajes que calan en la conciencia social de amplios grupos de la población envolviéndolos en la más completa oscuridad mental.

Los dueños de la propiedad sentados tranquilamente, disfrutando del aire acondicionado y saboreando una buena copa de wiski, observan como sus perros ladran y organizan el silencio y el miedo que inmoviliza y ata a los contrarios a su clase.

El fascismo es una ideología cuyo núcleo fundamental es el desprecio y el odio a la clase obrera y a quienes política y socialmente la representan. El fascismo gana terreno en la sociedad extremeña. El fascismo es la forma política que utiliza el capitalismo cuando las cosas le van mal, señalando la buena vida que llevan los obreros y lo bien pagados que están.

Los oportunistas que se ponen el traje azul de falsos defensores de los agricultores, de los pequeños propietarios, para criticar voraz y ofensivamente la lucha que las clases trabajadoras realizan para mejorar sus condiciones de vida, dejan a un lado, no sabemos si es que se olvidan o por interés individual y egoísta, dejan a un lado a quienes realmente los están saqueando y disfrutando de su sudor.

Estos elementos teñidos de azul tienen que descubrir que no son los obreros quienes los están hundiendo y los causantes de los males de su vida. Quienes los arruinan son sus propios amos, los dueños de las grandes empresas hortofrutícolas que les compran los productos al precio que el mercado y ellos buenamente establecen; las grandes multinacionales que les venden los inputs que necesitan para sus producciones a precios elevadísimos (maquinaria, semillas, abonos, insecticidas, combustibles, alimentos, etc.) y luego, les compran lo que ellos producen a precios de ganga; quienes les arruinan son las entidades bancarias que les prestan el dinero a unos intereses que apenas pueden cubrir, y para finalizar, la puntilla se la dan los gobiernos con sus normas y sus leyes, como herramientas al servicio de los poderosos que los arruinan.

La historia seguirá adelante y llegará el momento en el que arrollaremos y arrojaremos a la más cochambrosa basura a todos estos que con tanta fuerza vociferan y arremeten contra los obreros y obreras que luchan contra las injusticias que sus amos, señores feudales de otra época, quieren normalizar y reglamentar.

¡¡¡VIVA LA LUCHA DE LA CLASE OBRERA!!!

martes, 14 de junio de 2022

En apoyo a la clase obrera agrícola



Una Extremadura Digna y el PSLF apoyan las movilizaciones por un convenio colectivo digno que los jornaleros y jornaleras agrícolas realizarán los días 16,17 y 18 de junio con una convocatoria de huelga en el campo extremeño.

Desde Una Extremadura Digna y el PSLF apoyamos todas las movilizaciones obreras por los convenios colectivos dignos, como es el caso de las luchas de los jornaleros y jornaleras agrícolas que se oponen a los recortes patronales y a la reducción de derechos conseguidos en muchos años de luchas.

El capitalismo afila sus armas y quiere aprovechar que la desmovilización y poca capacidad de lucha del movimiento obrero le es propicio. En estos años aparece un terreno muy adecuado para llevar adelante una lucha de clases favorable a sus intereses. Nos encontramos con una clase obrera desvertebrada y desideologizada gracias a la intervención de la burguesía y del colaboracionismo de los sindicatos del régimen monárquico (CCOO, UGT).

La clase obrera tiene que reaccionar ante este envite de la patronal agraria y ante el empeoramiento de sus condiciones de vida a consecuencia de la inflación, con la subida de casi el 10 %, del IPC en nuestra región. Estas circunstancias están teniendo una repercusión muy negativa, con recortes notables en los salarios, pensiones y ayudas sociales que producen un empobrecimiento generalizado en una población en donde en casi el 40 % está en niveles por debajo del umbral de la pobreza.

Ante esta situación exigimos que la Junta de Extremadura y él gobierno del estado español tomen medidas destinadas a combatir este crecimiento de la inflación. En este orden de cosas, es necesario el incremento urgente de las ayudas sociales y especialmente, la renta de inserción extremeña, (renta básica extremeña), el incremento de todas las pensiones, del Ingreso Mínimo Vital, pensiones no contributivas, subsidios de desempleo, etc. Ingresos que no pueden quedar debajo de los 1200 euros que actualmente exigen las mareas pensionistas.

 Por otro lado, como ya hemos mencionado nos encontramos con unas patronales de las diferentes actividades productivas envalentonadas por diferentes motivos, económicos, sindicales y políticos. Lo que se avecina con el crecimiento de la derecha y extrema derecha va a suponer en las elecciones andaluzas un golpe definitivo a los partidos reformistas agrupados en torno a Podemos, IU y especialmente, al gobierno de Pedro Sánchez que sólo da muestras de dureza contra las clases trabajadoras.

Un buen ejemplo de esta audacia empresarial, es lo que está sucediendo en el sector agrario en el que las organizaciones patronales agrarias quieren imponer unas condiciones laborales liquidando derechos conseguidos después de muchos años de luchas, que venían recogidos en el convenio colectivo anterior que fue eliminado por la denuncia ante la justicia extremeña de las empresas de Afruex.

Las patronales agrarias no respetan el decreto 152/2022, de 22 de febrero, por el que se fija el salario mínimo interprofesional para 2022. En su artículo 1 se establece claramente la cuantía del salario mínimo interprofesional para cualquiera de las actividades en la agricultura, la industria y los servicios.

En términos generales, la burguesía regional y las multinacionales, dadas las favorables circunstancias señaladas, ven el momento oportuno para mejorar y aumentar los niveles de plusvalía con la imposición de duras condiciones laborales a la clase obrera extremeña, todo ello con la colaboración y el apoyo de las políticas del gobierno regional.

Así, el capitalismo que opera en el territorio extremeño no se va a detener para que crezca el plus valor obtenido del trabajo obrero, siempre con el apoyo del gobiernillo regional, manteniendo y mejorando los mecanismos de explotación y de funcionamiento normativo que lo hagan posible:

Regateando hasta el infinito la firma de convenios colectivos, obstaculizando administrativamente con todo tipo de interferencias para que no se paguen los salarios de los convenios o el salario mínimo interprofesional, obligando a la firma de nóminas en las que aparecen menos horas de las realmente se trabajan, recurriendo a la realización de muchas horas extraordinarias establecidas de antemano como obligatorias y al mismo precio que las ordinarias aunque quiten empleo a otros trabajadores y ahorren a los empresarios cotizaciones a la seguridad social, cuando no se efectúan inversiones que acaben con unas condiciones ambientales deplorables para la salud y la vida de los trabajadores y trabajadoras, cuando se siguen criterios diferentes en el acceso al subsidio agrario o a la renta agraria procedimientos que tienen por objeto fragmentar y dividir a la clase obrera agrícola, el escaqueo empresarial de las asignaciones de todas las peonadas realizadas para evitar cotizaciones a la seguridad social lo que impide el acceso a los subsidios agrarios, etc.

UNA EXTREMADURA DIGNA y el PSLF exigimos a la JUNTA DE EXTREMADURA que con los medios institucionales de los que dispone intervenga para que se cumplan las condiciones laborales, para que en los convenios colectivos los salarios no estén por debajo de lo legalmente establecido. El salario mínimo interprofesional es una referencia legal obligatoria sin subterfugios aprobado por el propio gobierno burgués, al igual que lo son todas las medidas de prevención y riesgos laborales que se refieren a la salud y la vida del trabajador o trabajadora. El gobierno regional tiene que obligar a las direcciones empresariales a que cumplan las condiciones ambientales en los centros de trabajo que respeten y cuiden de la salud de los trabajadores y trabajadoras que en algunos centros de trabajo industriales dejan mucho que desear.