Ayer,
el Ministro de Economía, en sus declaraciones a los medios de
comunicación, manifiesta que hay que proseguir con las reformas como
la única manera de apaciguar a los mercados. No sabemos si el Ministro con estas opiniones pretende engañarse a sí mismo o engañar a los españoles y españolas. Lo cierto, es que los mercados, o lo que es lo mismo, la banca
alemana, la francesa y la española, no se van a calmar; están a lo suyo que es ganar dinero, por lo que tienen que procurar que los intereses de la deuda pública española sigan subiendo,mientras mayores sean mejor les va a ellos
.
El
Ministro y el gobierno en su conjunto, cada día de manera más evidente nos demuestran que constituyen un gabinete encargado de defender los intereses de los mercados, es decir, la minoría social que controla la economía europea y española. Todas
las políticas del gobierno del PP
tienen unos objetivos muy concretos, liquidar el Estado del Bienestar,
privatizar sus servicios y extraer toda la riqueza que se pueda de los
Estados a través de la deuda pública.
El
Sr De Guindos razona en función de sus intereses y en el de sus amigos los
banqueros. Nos venden a través
de los medios de comunicación que lo que se hace no hay más remedio que
hacerlo; no hay otra salida ante la intranquilidad y el nerviosismo de los
mercados. Hay que asegurar que los mercados cobran sus intereses y su deuda; el gobierno tiene que hacer lo
que sea necesario, aunque se provoque un descenso en el nivel de
vida y en el bienestar de la mayoría de la sociedad.
En los presupuestos para el año 2012 se ha llevado a mínimos el gasto público que tienen un carácter social: educación,
sanidad, cultura, servicios sociales, dependencia, políticas de empleo,
etc.Por supuesto que a los ricos se les perdona el fraude fiscal y a las capas sociales trabajadoras se les suben los impuestos.
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